sábado, 17 de julio de 2010

Tentempié

Quise besarla de otra manera, pero antes le pedí que se desnudara lentamente, se fue despojando poco a poco de sus prendas y mientras se iba desvistiendo me echaba unas miradas de hoguera que me derretían, que hervían mi sangre, justo cuando llegó a la lancería le hice una señal con la mano y me la arrojó, la atrapé en el viento y me deleité con su aroma a ojos cerrados, el sabor a su coño y el aroma de su perfume fusionados me elevaba más el libido. Ya desnuda la contemplaba de pies a cabeza, una Venus que sólo el aire arropaba su piel, le dije que se acostará en la mesa con la cara hacia arriba, sus hombros al filo de la mesa con la cabeza suspendida, perdí mis dedos entre sus cabellos, nos besamos hasta ahogarnos el uno al otro con nuestras lenguas, luego le besé la pera mientras ella me besaba y mordisqueaba el torso, saqué mi lengua y desde su barbilla arrastré mi lengua hasta su pecho, quedó en medio de sus tetas, hice una pausa de un par de segundos, dándole tiempo a especular mi siguiente faena, en ese interludio, tomó con sus manos mi polla ya humedecida, de mi puntero emanaban unas gotas de la excitación, con su lengua de un zarpazo lamió mis fluidos y se introdujo todo el tronco hasta el fondo de su garganta, haciendo doblar las campanas. Ella pensó que me abalanzaría sobre uno de sus senos, que los haría mi presa, los elevó unas milésimas pero en eso seguí hacia delante por su vientre, dejando una estela de saliva por su piel erizada, sus poros gemían sedientos a mi paso, mi siguiente escala fue su ombligo, el cual apuntalé con mi lengua hecha una aguja que se introducía en forma de espiral...

sábado, 26 de junio de 2010

Seducción II

Después del blanco, entrégame el rojo pasión con tus piernas como compás con el melocotón clamando ser mordido.
El juego de la seducción es tan variado como el arcoíris, que ahora me ofrece el magenta...


miércoles, 23 de junio de 2010

Seducción


Si quieres seducirme, sedúceme con los colores que me apasionan,
enfunda ese trasero en una tanga color negro.


Excítame con el blanco en una posición para embestir.
Es el juego de la seducción.

martes, 13 de abril de 2010

Llamadas cargadas

La noche se empezaba a tornar bacanal, mientras degustábamos unos tragos, me lanzaste una retorica embriagada de libido diciéndome “te voy a violar”, mis oídos captaron el tono de tu voz excitada disfrazada por esa amenaza, que realmente me cedías el camino y dejabas las puertas de par en par. La sangre de lobo hambriento empezaba a hervir por la estimulación de tu ofrecimiento, el imaginar que más tarde iniciaría la jauría me elevaba la sed. Un timbre dio paso a unos segundos de silencio, momentos que aproveché parir al water a evacuar, mientras caminaba entre la penumbra, mi pene iba creciendo y creciendo, al bajar la cremallera mi miembro broto erguido, expelí, unas cuantas sacudidas le di que dieron paso a unas leves caricias que incitaban a masturbarme, pero decidí que fueras tú quien siguiera con tan placentero ajetreo, deje mi miembro exhibido, suspendido, abrazado por la cremallera de mi pantalón beige de pinzas, así retrocedí a tu encuentro, con el glande rompiendo el viento entre la penumbra, sintiéndolo como se balanceaba y se ponía más erecto por el vaivén, estando cercas de ti notaste que iba desenvainado, tus ojos asombrados echaron una mirada de deleite, al acercarme a ti, tú seguías hablando por teléfono, yo me limite a darte ordenes con los ojos, con tu mano izquierda la cual estaba desocupada apañaste mi pene el cual estaba adornado por las venas a punto de reventar, empezó el ir y venir de tus manos con una masturbación lenta que iba agarrando su ritmo, mientras yo perdido en el nirvana, con los ojos de niebla, arqueándome levemente hacia atrás, aquello me excitaba demasiado, tu hablando y jaloneándome, yo perdido en la lujuria y la sincronía de tus caricias, de tus delicadas manos, colgaste para dar paso a otra llamada, la del teléfono de carne y sus fluidos.

miércoles, 10 de marzo de 2010

Sugestivo

Seductoras imágenes abrazan mi mente, cuando recuerdo mi fruta incrustándose en tu fruto, haciéndolo sucumbir, como mi glande se estalla en tu vulva, provocando oleajes con sus pliegues, como tus labios aturdidos por el embiste de mi sexo se desfloran, como los pétalos de tu entrepierna derraman su néctar en mi... en cualquier imagen deshojo tu cuerpo, ventilo tu esencia.

sábado, 6 de marzo de 2010

Curvas

Tu silueta no se dibuja completa con la penumbra, esas curvas que guardas ocultas en la oscuridad, las recreo con mis manos hambrientas y sudorosas, las degusto con pinceladas de mi lengua, lengua humedecida y erguida por la excitación y el deseo, tu piel erizada por el líbidine clama que sea delineada por mi falo erecto una y otra vez. Curvas que se pierden entre mis brazos, cuerpo desnudo que me cedes en la oscuridad.